Todo lo que debes saber sobre la piel sensible

La piel sensible 

Cada día nos encontramos con mayor frecuencia pieles con hipersensibilidad,  presentan rozaduras, irritaciones e inflamaciones.

La piel sensible puede ser desde grasa a seca.

Por causa de tantas irritaciones se puede desarrollar una hiperamia y eso puede desembocar en una creciente y constante combinación de piel irritada e inflamada.

Se debe de tener cuidado con los ingredientes que se utilicen para su limpieza y cuidado, así como también los tratamientos ya que se puede tener alguna alergia o desarrollarla sin saberlo.

El tratamiento para la piel sensible debe remontarse en la utilización de preparados que mantengan un balance en la piel y sean calmantes. Para el tratamiento manual debe realizarse suavemente.

Tomar nota que al tratar a estos pacientes debes crear una atmósfera de paz, disminuir los ruidos externos, puedes disponer de herramientas tales como la aromaterapia, el calor y la música para crear un ambiente armonioso.

Factores que pueden influir para no tener una piel sana.

* El medio ambiente: mala calidad del aire, exposición a los rayos UV.

* Poco tratamiento de la piel o el uso de un tratamiento inadecuado para tu tipo de piel.

* Alimentación, mala calidad del agua,  exposición al sol sin bloqueador, fumar.

* Bloqueo de los chacras de energía.

* Problemas del aparato digestivo o del sistema nervioso.

* Hongos, bacterias, virus y parásitos.

* Miedos, pensamientos negativos, rencores, envidias.

* Preocupaciones, estrés.